La enseñanza de la higiene personal a los niños es fundamental. Y es un aspecto de la vida muy Montessori , si lo pensamos bien, porque la independencia también pasa por el autocuidado. Maria Montessori concedió gran importancia a la enseñanza de la vida práctica: vestirse, lavarse, atarse los zapatos. Por ello, queremos explicaros ahora una actividad sencilla, necesaria y que para tus hijos será como un juego. Veamos cómo lavar los muñecos con los niños aplicando el método Montessori.
Lavar muñecos con el método Montessori
Pasada la Navidad y los Reyes, los niños se habrán llenado de juguetes y también de muñecos, y aunque pueden jugar con ellos hasta que se cansen, no debemos olvidar que si tu hijo o hija tiene un muñeco o una muñeca que lleva a todos lados y que incluso duerme con él, es necesario procurar que esté limpio y con ello no solo que le dure más tiempo, sino que además, podamos evitar que se produzca transmisión de gérmenes hacia el niño o niña debido a la suciedad del muñeco.
Para ello, podemos implicar sin problema a los niños y hacerlo mediante una actividad Montessori que nos va a servir para hacer que el concepto de la importancia de la higiene personal sea algo lúdico, especialmente cuando la aplicamos a los muñecos.
Así, combinando las actividades de vertido con agua y la enseñanza de la higiene personal, obtenemos este juego verdaderamente educativo, que ayuda a la coordinación mano-ojo, que es divertido y que estimula a los niños a apreciar la higiene.
Cómo se hace
Lo que podemos ofrecer a los niños es una actividad para el lavado de muñecos (de plástico, no de tela) y para ello, tendremos que empezar por una mesa baja , que puede ser simplemente la del dormitorio o la mesa de juegos que tengamos en casa y que los niños usen a diario para sus manualidades o cuando pintan.
Si los niños son muy pequeños, estamos seguros de que salpicarán agua por todos lados (pero eso es normal y correcto). Por tanto, podemos optar por un día agradable y hacerlo al aire libre, o elegir un rincón de la casa que no sea demasiado delicado. Cuando los niños crezcan y adquieran una mejor coordinación, este juego se podrá jugar de forma segura en casa. De hecho, es aún mejor: de esta manera calcularán los riesgos de derrame de agua y mejorarán en gran medida su coordinación.
A continuación, colocamos sobre la mesa una bañera para bebés de juguete, o una simple palangana para lavarse las manos. Junto a esto disponemos todo lo que necesitamos: toallas pequeñas , toallitas húmedas , un cepillo de dientes , un jabón suave (porque en cualquier caso entrará en contacto con las manos de los niños, aunque los muñecos no se verán afectados), una esponjay un cepillo .
Luego llenamos la palangana con agua y dejamos que los niños laven sus muñecos.
Comenzaremos con toallitas húmedas, para limpiar la suciedad más grande. Pasamos luego al cepillo de dientes (mojado con agua) para llegar a los rincones más difíciles (los ojitos, la nariz…). Y luego la muñeca se sumerge en el recipiente lleno de agua tibia.
Será entonces cuando los niños realicen el baño real: con jabón y esponja lavan el cabello y el cuerpo de la muñeca, suavemente, luego enjuagan muy bien.
Y luego solo tenemos que secar con una toalla, cepillar su cabello y secar con un secador de pelo suave.
Si queremos, también podemos poner en la muñeca un pañal de bebé real (¡desechable o lavable!), Para completar la experiencia de una manera aún más real e incluso aplicando un poco de crema para el culito del muñeco o muñeca.
¡Y listo! Hemos acabado de limpiar el muñeco y nuestro hijo o hija estará feliz del trabajo realizado, habrá aprendido y además se habrá divertido pasando tiempo junto a papá y/o mamá.
