Dicen que la pandemia ha trastocado la vida de buena parte de la humanidad, si no de toda. En ese rango se incluye también a los parlamentarios, que pasaron de sus tranquilas sesiones presenciales a los debates vía Zoom. El problema es que muchos de ellos no parecen adaptarse a los problemas que conlleva el uso de estas tecnologías y suelen olvidar apagar los micrófonos y/o las cámaras, quedando expuestos a situaciones que muchas veces son poco nobles.
El último caso tiene como protagonista al honorable diputado paraguayo Roberto González, del Partido Colorado, quien durante la sesión por el otorgamiento de un premio al músico Francisco Russo, aparece sin camisa. Luego se pone de pie y da la espalda momentáneamente a la cámara, dando la impresión de que en realidad no lleva nada puesto. La escena fue compartida rápidamente en cadenas de Whatsapp y en redes sociales.
"Me había manchado la camisa con tereré, por lo que me la saqué. Me olvidé de que estaba sin camisa y que la cámara estaba activada, fue cuestión de un segundo. Luego me levanto, tomo la camisa y eso fue lo que ocurrió. De todas maneras presento mis disculpas a la ciudadanía, porque fue una desatención”, dijo el parlamentario al diario ABC. En radio 1080 AM reiteró que solo se quitó la camisa. "Soy un hombre que cuida detalles, nunca me descuidé”.
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— ry 🌹 Wed Sep 28 03:14:59 +0000 2016
Al parecer, el Parlamento paraguayo ya tiene tradición en estos asuntos. En junio, el diputado Jorge Antonio Brítez se quitó la camisa para protestar contra el desamparo de los habitantes de Alto Paraná, que viven con lo mínimo. Buena parte de su discurso lo hizo con el torso desnudo. Sin embargo, el episodio más recordado de los últimos meses ocurrió en Argentina, donde el 24 de septiembre el diputado kirchnerista Juan Emilio Ameri alcanzó fama internacional al ser captado por su cámara durante una sesión besando los pechos de su pareja.
"Estoy muy mal, la verdad es esa. Estoy desolado, esto no me tendría que haber pasado”, dijo Ameri, que esa misma noche presentó su renuncia al cargo. Explicó que solo quería saber cómo había quedado una operación a la que se había sometido su pareja, quien tras el episodio se encuentra con tratamiento psicológico. "Yo acá en mi casa tengo una señal espantosa que va y viene. Estaba desconectado, sin cámara”, intentó justificar Ameri.
El Parlamento de Chile ha tenido episodios similares. Por ejemplo, la senadora derechista Jacqueline van Rysselberghe participaba en la sesión telemática del 28 de marzo de 2020 y votó acostada en su cama bebiendo una copa de vino, como se evidenció durante la transmisión oficial del Canal del Senado.Hay otro caso: el 22 de agosto, el también senador derechista Francisco Chahuán votó mientras iba en un vehículo, algo que no está permitido. Para simular, el parlamentario usó un fondo falso, pero fue descubierto y se excusó diciendo que sus asesores no estaban con él.
Otro caso lo protagonizó el diputado independiente Pepe Auth, que durante una sesión del 25 de septiembre contó que cometía un delito: tomaba los votos de su pareja y suegra, ambas italianas, y votaba él en lugar de ellas en las elecciones de ese país europeo. "Es un hecho ilegal, pero estoy con fuero”, dijo. La embajada de Italia reaccionó con estupefacción.
DZC (ABC, Todo Noticias, La Nación)